TransMilenio, un foco rojo de inseguridad en Bogotá
El Sistema de Transporte Masivo de Bogotá, TransMilenio, se ha convertido en un reflejo de los problemas que aquejan a la capital de Colombia: inseguridad, desorden y falta de control.
A pesar de ser una de las principales arterias de transporte público, los usuarios se enfrentan a diario a una serie de situaciones que ponen en riesgo su integridad física y sus pertenencias. Desde robos y hurtos hasta la presencia de personas en condiciones de calle, el sistema ha dejado de ser un espacio seguro para los ciudadanos.
Los datos presentados son elocuentes: las cifras de hurtos en estaciones y portales de TransMilenio son alarmantes y evidencian un problema estructural que requiere una solución integral. La concentración de delitos en puntos específicos, como la Avenida Jiménez, Ricaurte y el Portal del Norte, demuestra que la inseguridad no es un fenómeno aislado, sino una problemática sistémica que afecta a todo el sistema.
Los diez puntos entre estaciones y portales, con las cifras más altas de hurtos a personas entre enero de 2023 y julio de 2024, a saber:
- Avenida Jiménez (402 hurtos)
- Ricaurte (225 hurtos)
- Portal del Norte (143 hurtos)
- Calle 100 (142 hurtos)
- Calle 76 (124 hurtos)
- Portal del Tunal (122 hurtos)
- Banderas (104 hurtos)
- Portal de las Américas (94 hurtos)
- Portal de Usme (90 hurtos)
- Marly (89 hurtos)
Entre el 1 de enero y el 31 de julio de 2024, los hurtos en el Sistema Integrado de Transporte Público se presentaron así: 2.313 en buses articulados, 1.241 en estaciones y portales de Transmilenio, 664 en buses zonales y 542 en buses alimentadores.
Puntos decisivos
El Sistema de Transporte Masivo de Bogotá registra un problema complejo de inseguridad que requiere una solución integral y a largo plazo. Es fundamental que las autoridades competentes tomen medidas concretas para garantizar la seguridad de los usuarios y recuperar la confianza en el sistema. Algunas problemáticas a tener en cuenta:
Ventas informales Haciendo un recorrido por el sistema, un punto a tratar son las ventas informales dentro de las estaciones, vagones o articulados, un asunto que no ocurre en el emblemático Metro de Medellín, donde existen restricciones a esta clase de comercio informal.
Esa presencia de vendedores ambulantes o la ocupación masiva de los espacios destinados al flujo de pasajeros dificulta el control y facilita la comisión de delitos.
La evasión del pago del pasaje La falta de controles efectivos en los accesos permite que un gran número de personas ingresen al sistema sin pagar, lo que genera pérdidas millonarias para la empresa y un ambiente propicio para la delincuencia.
Se cuestiona la estrategia utilizada por la empresa Transmilenio para controlar a los evasores del pago, pues la instrucción que tiene el personal de seguridad privada es ubicarse en los torniquetes, cuando los colados entran por las puertas laterales de las estaciones o vagones.
Además de la inseguridad, se tiene un reporte de la evasión en el componente troncal, que para el primer semestre de 2024 tuvo un costo estimado de $119.135 millones de pesos.
Controles y requisa policial La poca o la mínima acción de la Fuerza Pública dentro de las estaciones y portales, pues hasta se evidencia personas en condición de indigencia dentro de las mismas y no existen controles para contrarestar la presencia de individuos sospechosos que puedan cometer hurtos.
Los invitamos a seguir el canal de VALAGUELA en WhatsApp. Activen la campanita. https://whatsapp.com/channel/0029Va6O16c2UPBIANIkGQ2g
Visiten nuestras cuentas en X (Twitter), Instagram, Youtube, TikTok, Facebook y demás plataformas. Arriba encuentran los íconos de acceso. Correo medios.sipuedo@gmail.com